Biografía del exleproso

En un lugar de Judea cuyo nombre no es relevante, nació un niño negro muerto. Bueno, en realidad era blanco y estaba vivo, pero habría sido más graciosa la historia alternativa. El caso es que ese niño creció bajo la tutela de un sacerdote, con lo cual se convirtió en su monaguillo. Como buen monaguillo, el joven se dejaba abusar por su tutor legal, lo cual no estaba mal visto en aquella época. A él le gustaba. Oh si. Total, que pasaron los años y el joven monaguillo se cansó de ver aumentar el diámetro de su tercer ojo y salió en busca de una vida mejor, un futuro mejor, un mundo mejor.

Emprendió un viaje por el mundo que duró 79 días, pero como no era múltiplo de 10 su viaje no se hizo famoso. Durante su viaje adquirió nuevas habilidades que le iban a ayudar a desarrollarse exitosamente en su futuro laboral (en otras palabras, pilló la lepra). Durante 16 años fue un hombre feliz mendigando, hasta que un día Jesús le curó sin pedirle permiso. Su vida había perdido sentido. Intentó mendigar como exleproso, pero no obtenía resultados.

Un buen día, después de contarle su vida a un joven que pasaba por ahí y que éste le recompensara con una puta mierda, se dio cuenta de que iba a morir de hambre. En ese momento, se puso a silbar.

Murió.